Una lección clave de la pandemia es que, cuando la comunidad trabaja en conjunto, puede hacer cosas asombrosas. La colaboración –presente y pasada– de la comunidad científica en la creación de las vacunas hizo posible que se lograse en 11 meses lo que en el pasado tomó entre 4 y 20 años.
Del mismo modo, el impacto y la eficacia de los esfuerzos en el desarrollo de un proceso de TD se magnifican cuando organizaciones, comunidades locales y gobiernos trabajan compartiendo recursos, conocimiento y áreas de enfoque. Al colaborar no solo es posible aunar recursos y experiencia para beneficiar cada iniciativa, sino también para fortalecer a la comunidad mundial.
En este sentido, el BID fomenta la colaboración en cuatro ámbitos específicos de la TD: la alineación con los movimientos y socios regionales y globales; el uso y contribución a plataformas y repositorios de conocimiento existentes; el apoyo y contribución a las redes y comunidades de práctica en la región para seguir aprendiendo en conjunto; y la colaboración con el sector privado.
En el primer ámbito, el BID ha fortalecido su colaboración con la OPS para mejorar su enfoque de contribución a los países y elevar los estándares requeridos en ALC. Esto incluye la armonización de programas de apoyo y aprendizaje para evitar duplicaciones y mensajes descoordinados, el desarrollo de planes estratégicos y hojas de ruta para los países, y el análisis de sinergias en inversión. Igualmente, el BID ha colaborado en el desarrollo de las dos políticas regionales de la OPS para avanzar la salud digital en la región, incluyendo la hoja de ruta para la transformación digital del sector de la salud de las Américas. Por último, en sus proyectos, el BID aplica los estándares de interoperabilidad, ciberseguridad y privacidad promovidos por la OMS, la OPS y la Unión Internacional de Telecomunicaciones y la Organización Internacional de Normalización (ISO, por sus siglas en inglés).
“Reunirse es un comienzo, permanecer juntos es un progreso; trabajar juntos es el éxito.”
- Henry Ford -
En 2018 el BID avaló los principios de desarrollo digital: 9 pautas para la exitosa implementación de proyectos de desarrollo digital.
El segundo campo de colaboración del BID se centra en el uso y la contribución a los repositorios y plataformas de intercambio de conocimientos existentes y compilaciones de recursos tales como código abierto, artículos, marcos para donantes, médicos y tecnólogos, desarrollados por diversas organizaciones. Ejemplos de estos repositorios incluyen Social Digital y el Código para el desarrollo del BID.
En el tercer ámbito, el BID apoya a las comunidades de práctica, centros de excelencia y redes sobre salud digital establecidas para crear espacios de aprendizaje dentro y fuera de la región. Entre los centros de excelencia, se destaca el Hospital Italiano de Buenos Aires, y, entre las redes pioneras, se destaca Asia eHealth Information Network. Otra experiencia importante en la región es la Red Americana de Cooperación sobre Salud Electrónica (RACSEL), cuyos miembros fundadores incluyen los Ministerios de Salud de Chile, Colombia, Costa Rica, Perú y Uruguay. RACSEL fue creada en 2014 con el apoyo del BID para impulsar la salud digital transfronteriza. El BID también impulsa Bienes Públicos Regionales para la salud digital. De esta forma, por ejemplo, ha trabajado con la Agencia de Salud Pública del Caribe (CARPHA) para apoyar el turismo seguro y con el Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud (CENS) y RACSEL en la creación de LACPASS, para asegurar la creación de certificados para COVID-19 según estándares internacionales.
RACSEL: gobiernos de ALC trabajando juntos para mejorar la salud digital
Finalmente, el Grupo BID colabora activamente con el sector privado, promoviendo una visión y accionar compartidos para la inversión e implementación de innovaciones en salud digital, la productividad del sector y el desarrollo de capacidades de los trabajadores en los campos de TIC.
La convicción de Henry Ford “si todos avanzamos juntos, el éxito se soluciona solo” resuena hasta hoy día. Ford no inventó el automóvil ni siquiera inventó la línea de montaje, pero fue el responsable de transformar la industria automóvil con la alineación de recursos, la armonización de estrategias y la contribución de los involucrados, logrando un impacto que se extiende hasta hoy. El éxito de la transformación de los sistemas de salud de ALC requiere, entre otros factores que este documento explora, de la colaboración entre el sector privado, el gobierno y la sociedad civil (especialmente los ciudadanos y las asociaciones profesionales) y de la asistencia de los socios internacionales para el desarrollo. De la unión, nace la fuerza.
El BID y BID LAB unieron esfuerzos con Capital Salud y 1DOC3 en un programa de asistencia en salud dirigido a reducir las barreras de acceso a personas en condición de vulnerabilidad en las ciudades de Armenia y Bogotá, en Colombia. La colaboración materializó una solución, escalable y adaptable a entornos en los que la demanda por servicios de atención médica supera ampliamente los recursos físicos (instalaciones) y profesionales (médicos) disponibles.
Alexandre Bagolle, Especialista en protección social
y salud
División de Protección Social y Salud
¿Cómo promover la interconexión de los ecosistemas de salud dentro y entre los países de ALC?
En una región interconectada, las personas podrán desplazarse entre países, teniendo siempre sus datos de salud disponibles y al día, en forma segura y confidencial.
Referencias:
1 (Figura12) Organización Panamericana de la Salud (OPS), Sistemas de información para la salud. Proceso de aplicación en la subregión del Caribe: enseñanzas obtenidas y examen posterior a la acción, 2016-2019, (Washington D. C.: OPS, 2021), 54.